El nuevo informe de la Fundación UNIR revela un panorama complejo para Bolivia en el período agosto-noviembre de 2024. El documento revela cómo el Movimiento al Socialismo (MAS), principal fuerza política del país, atraviesa una severa crisis interna que amenaza con fragmentar no solo al partido, sino a la estabilidad nacional. Las disputas por la candidatura presidencial para 2025 han generado conflictos que van más allá de las tradicionales pugnas partidarias, proyectando un escenario electoral imprevisible.
La dimensión económica añade aún más complejidad al panorama. La escasez de dólares, el desabastecimiento de combustibles y el incremento sostenido de precios están generando una movilización social sin precedentes. Sectores productivos, gremiales y ciudadanos están desarrollando una capacidad de organización y resistencia que desafía la tradicional respuesta estatal.
Con la mirada puesta en 2025, el informe advierte sobre un potencial punto de inflexión: la combinación de tensiones políticas preelectorales y una crisis económica persistente podría desencadenar una escalada de conflictos sociales que pondrá a prueba la gobernabilidad democrática del país.
Un análisis imprescindible para comprender los desafíos que Bolivia enfrentará en los próximos meses.